¿Quién compra «fast fashion»? Este es el perfil, según un estudio.

Mujeres, menores de 40 años, con formación superior, trabajadoras activas y que no viven solas: así son las compradoras de «fast fashion».
Gallegos, vascos y catalanes, los que más dicen preocuparse por la moda sostenible.

Una cuarta de los españoles dicen tener en cuenta la sostenibilidad, mientras que a otra cuarta parte no le importa en absoluto.

Casi un 90% de la población española adquiere su ropa principalmente en cadenas de moda fast fashion (67,2%) o ultra fast fashion (22%), y dos de cada diez personas consultadas gastan más de 50 euros al mes en prendas de esta naturaleza. Pero hay muchos más datos de interés.

Todos proceden de un informe de la banca ética Triodos Bank. El primer estudio «Conductas sostenibles de la población española» realizado por dicha entidad (que cumple veinte años de presencia en España) analiza el grado de conocimiento, hábitos e implicación de la sociedad española en materia de sostenibilidad, en ámbitos como la movilidad, el consumo, el ahorro energético o el bienestar personal, entre otros.

He aquí algunos de sus hallazgos en lo que respecta a la moda:

Un 51% de quienes respondieron reconoce que compra ropa todos los meses.
Un 45,6% adquiere entre una y tres prendas, y el 4,1% afirma que compra cuatro o incluso cinco piezas cada mes.
Se observa mayor frecuencia en las mujeres, entre las que un 54,9% admite que invierte parte de su presupuesto mensual en la adquisición de ropa, ocho puntos porcentuales por encima de lo que manifiestan los hombres (46,9%).
A medida que aumenta la edad desciende el interés por la compra de prendas nuevas.
Un 60% de la «Generación R» -mayores de 65 años- no gasta dinero en ropa de forma recurrente.
Las personas jóvenes de la Generación Z -entre 18 y 25 años- son las que más moda consumen, con un 76,9% que dice adquirir una prenda o más al mes.
Los resultados globales del Estudio permiten formar el perfil comprador de fast fashion: mayoritariamente mujeres, menores de 40 años, con formación superior, trabajadoras activas y que no viven solas.
Solo el 26% de quienes respondieron tiene en cuenta que los materiales de las prendas que compran sean reciclados o sostenibles, aunque casi el 57% estaría dispuesto a pagar más por prendas respetuosas con el medioambiente.
No obstante, poco más de tres de cada diez personas consideran determinante en su decisión de compra que se respeten los derechos laborales y se cuide el planeta.
Cabe destacar que el 50% de la población no tiene en cuenta estas cuestiones, pero le gustaría hacerlo, frente a un 25% al que le da igual que la ropa esté fabricada con materiales sostenibles.
Las mujeres están más concienciadas con la sostenibilidad de los materiales de la ropa que compran (28,4%), cinco puntos por encima de lo que afirman los hombres. Asimismo, las personas mayores de 56 años son las que demuestran más concienciación, con un 60%.
El Estudio muestra también el significativo desconocimiento que existe en la sociedad sobre las certificaciones ecológicas relacionadas con la fabricación de productos textiles. Solo un 20,4% de las personas encuestadas conocen alguna.
Las personas de entre 26 y 40 años (25%) son las que mayor conocimiento tienen sobre las etiquetas y certificaciones ecológicas.
En ese contexto, al preguntar por los hábitos a la hora de ir de compras, como el uso de bolsas reutilizables para guardar las prendas nuevas, encontramos que el 91,6% de los consultados las usa ocasionalmente y un 46,2% lo hace siempre, lo que muestra una mayor conciencia sobre la reducción del plástico.
Casi un 70% de la muestra dona la ropa que ya no usa y alrededor del 24% la vende en webs de segunda mano para favorecer su reutilización. Por edad, destaca la población entre 18 y 40 años, con un 36% de personas usuarias habituales de estas plataformas.
Según los resultados del Estudio, la ciudadanía de Galicia es la que tiene mayor interés y es más proclive a pagar por ropa sostenible, con un 64,4% de personas consultadas que así lo afirman. Le siguen el País Vasco, con un 62,1%, y Cataluña, con un 61,3%.
Por el contrario, Andalucía (48,6%), Cantabria (49,8%) y La Rioja (52,8%) son las comunidades cuya ciudadanía manifiesta menor interés y menor predisposición a gastar más dinero en la compra este tipo de prendas.