España permanece como primer cliente (aunque con seis puntos menos de peso) y primer proveedor (pero se deja siete puntos).
El sector portugués de textil/confección se ha visto tan perturbado por la pandemia de Covid-19 como el de otros muchos países. La exportación comenzaba bien el año, con un crecimiento del 4% en enero. Febrero fue un mes de estancamiento, y la exportación ya se contrajo en un 1%. La caída se acentuó en marzo con un –18% y volvió a acentuarse en abril, con un –42%.
Aunque desde ahí se notó una inflexión al alza, no obstante a la altura de julio todavía la comparación interanual, mes por mes, era negativa por un 8%. En el acumulado de enero a junio, el índice de producción del sector textil era un 20% inferior, y el del sector de la indumentaria un 37% más bajo.
Las importaciones, en negativo en cada uno de los meses, comenzaron a caer en marzo, y aunque después del –33% de abril iniciaron una inflexión, no sólo seguían en negativo en julio, sino que el descenso era entonces del 21%, volviendo a ahondar en la caída tras un junio no tan malo.
España, cliente número uno de Portugal en textil/vestir, es también el que más ha recortado sus compras en los siete primeros meses de 2020. Las importaciones de España a Portugal en el sector han caído un 29,4% en valor (euros), mientras que las de Italia disminuían menos, un 13,9%, y las de Holanda, Suecia y EEUU lo hacían un 10% o algo más. Las de Reino Unido bajaron un 8,5% y las de Alemania sólo un 1,8%. Francia, por el contrario, las ha aumentado en un 4,9%.
Eso ha modificado el peso de cada país en la cartera de clientes de Portugal, aunque el orden sigue siendo el mismo.
España generaba un 31% de la exportación portuguesa, y ha perdido seis puntos, hasta suponer ahora un 25%. Por el contrario, Francia ha ganado tres, pasando del 13 al 16%; Alemania, dos, del 8 al 10%. Y Reino Unido, un punto, del 7 al 8%.
En sentido recíproco, España sigue siendo el primer proveedor de Portugal, con un 29% de las importaciones portuguesas, pero se deja siete puntos (pesaba un 36%), con una caída del 29% en la cifra en euros.
China pega un estirón, con un crecimiento del 73% en los siete meses, y caen Italia, Alemania, Francia, India, Pakistán, Holanda, Turquía... El resultado es que China adelanta limpiamente a Italia como segundo proveedor de Portugal, doblando su peso, del 8 al 16% sobre las importaciones totales. Por cierto, estaba a 28 puntos de distancia de España en 2019, y sólo a 13 en el acumulado a julio.
España exportaba a Portugal 4,5 veces más que China, en valor, en 2019. Sólo 1,8 veces más, en los primeros siete meses. Las distancias se han acortado extraordinariamente.
Publicado en TEXTIL EXPRES - Revista Número 251 - Octubre 2020
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