Inditex encuentra una solución para Rusia: se va, pero podría volver.

Logra un acuerdo para desprenderse de sus tiendas... con opción a regresar bajo otra fórmula.

Una medida inteligente de Inditex ha sido negociar una venta de su negocio en Rusia, que ya tenía paralizado desde marzo (lo decidió tras la invasión de Ucrania por el ejército ruso), pero dejando una puerta abierta a regresar en cuanto sea posible.

El grupo gallego ha alcanzado un acuerdo con un grupo inmobiliario radicado en los Emiratos Árabes Unidos, Arab Dahder, con el que ya tenía relaciones (explota las franquicias de Inditex en Oriente Medio y Norte de África), por el que le venderá su medio millar de tiendas en Rusia, traspasándole además la mayoría de los 9.000 empleados con que contaba en el país.

Daher, que también es dueña del Dubai Mall, tiene marcas propias de distribución de moda, con las que operará en la red de tiendas obtenida de Inditex. Pero el acuerdo tiene una cláusula que contempla la posibilidad de que Inditex recupere la actividad en esas tiendas mediante un acuerdo de franquicia, si las circunstancias lo permiten en un futuro.

Rusia era para Inditex su segundo mayor mercado. Aunque mantenía cerradas las tiendas desde marzo, debía seguir abonando los alquileres de la mayoría de los locales. En el primer semestre anotó un cargo extraordinario de 216 millones de euros, como provisión para cubrir las pérdidas en que incurriría por este hecho.

Se cree que la cadena Mango está buscando una solución similar.