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Fue a comienzos de los años 80 (hace, por tanto, treinta años) cuando se inició una importante relación entre el textil marroquí y el textil español. La industria española empezaría por entonces una política de deslocalización de la producción, y Marruecos se convirtió enseguida en nuestro principal proveedor de proximidad, en régimen de subcontratación. Era el taller de apoyo que necesitábamos.
Marruecos no se limitó a ser un colaborador pasivo. Promovió activamente su imagen, en acciones organizadas por la Asociación Marroquí de las Industrias del Textil y del Vestido, Amith, tanto invitando a clientes españoles a las ferias que organizaba en Casablanca como trayendo a España, principalmente a Barcelona, sus propias manifestaciones o participando en actos empresariales españoles relacionados con el textil.
Esta presencia viva de la Amith en las esferas del textil español fue particularmente intensa en los primeros años 2000, cuando era presidente de la citada corporación marroquí Salah Eddine Mezouar, hombre muy bien relacionado con los ambientes españoles porque era el director de la empresa textil algodonera Settavex, filial marroquí de un grupo español; hombre que más adelante cesaría en la presidencia de Amith para ocupar el cargo de ministro de Industria en el Gobierno de Marruecos.
En todo ese tiempo se habían ido tejiendo unas relaciones, poco visibles pero muy importantes, de colaboración empresarial entre los dos países, hasta el punto de que, a mediados de la década, España rebasó a Alemania y a Inglaterra como clientes de la confección marroquí, y finalmente desbancó a la propia Francia en su papel histórico de primer mercado; y Marruecos, correlativamente, pasó a ser nuestro primer proveedor de subcontratación, por delante de Portugal.
Entre tanto, en un movimiento inverso, algunas compañías españolas empezaban a instalar filiales de fabricación en Tánger. Es decir, se estaba tramando una verdadera red de colaboración.
El trauma de los 2000: el efecto chino y la crisis financiera. ¿Qué sucedió a mediados de los 2000? Las circunstancias internacionales cambiaron con la entrada de China en el comercio mundial y, sin tener nada que ver con las relaciones hispano-marroquíes en particular, las afectaban inevitablemente porque las condiciones de competitividad de la ribera sur de la cuenca mediterránea se vieron perjudicadas en la confrontación con los costes chinos. Hubo un cierto desvío de los pedidos de la industria textil europea, los españoles también, hacia el Pacífico. Aunque un protagonista tan notable como el grupo Inditex mantuvo a Marruecos entre sus bases de aprovisionamiento, aunque fuera con menor intensidad.
En ese tiempo el textil marroquí disminuyó su labor de promoción en el mercado español, mientras que, por otra parte, el propio sector textil-confección español sufría una importante transformación, que todavía continúa, agudizada por los efectos de la crisis financiera internacional que entre tanto sobrevino.
Un nuevo equilibrio en la dinámica de costes. En estos momentos, como es bien sabido, la dinámica de los costes está cambiando de nuevo. Ahora son los costes chinos del trabajo los que se encarecen y, como la competitividad es siempre un factor relativo, la oferta marroquí recobra todo su interés. Por otra parte, la industria europea en general, y la española en particular, han aprendido en este tiempo que, aparte del coste estricto de mano de obra, puede haber otros factores que hagan la producción a larga distancia menos ventajosa de lo que a primera vista parecía, sobre todo si, como muchas veces ocurre, no se opera a una escala masiva.
Por otra parte, durante los últimos tiempos la confección marroquí ha evolucionado mucho, y no sólo está en condiciones de ofrecer producción a un coste competitivo, sino un producto propio interesante para mercados de cierto nivel. Es decir, ha evolucionado en el desarrollo de colecciones, en la elaboración de estilos, en aquellas facetas que conciernen a la creatividad.
Y es ahora cuando Marruecos ha decidido pasar de nuevo a la ofensiva. O sea, volver con su oferta al primer plano de la escena pública.
Maroc in Mode & Maroc Sourcing. De acuerdo con lo que acabamos de mencionar sobre los avances cualitativos del sector marroquí del vestir, Marruecos organiza ahora un doble evento que trata de presentar, estructurada en dos vertientes complementarias, toda su oferta actual. Por eso hay una doble cabecera:
AMaroc in Mode para presentar la creatividad de los diseñadores marroquíes y de las marcas de prestigio de las compañías nacionales con creación propia («Private labels»).
AMaroc Sourcing para ofrecer una completa plataforma de aprovisionamiento en régimen de subcontratación, con tejidos, accesorios y complementos, incluyendo una red de servicios con conexiones en toda la región mediterránea.
En el sector textil, donde las compañías tienden a optimizar sus procesos productivos mediante lo que se conoce como el «lean retailing», Marruecos tiene mucho que ofrecer por disponer de:
—Situación geográfica privilegiada.
—Experiencia en «fast fashion» o «pronto moda».
—Costes laborales inferiores a los de países como Turquía o Europa del Este.
—Flexibilidad en el volumen de producción.
La creación de una zona de libre comercio en la región euro-mediterránea elimina los costes aduaneros y acorta los tiempos. Los fabricantes marroquíes son eficientes y seguros en su trabajo. Los plazos de expedición y transporte a Europa pueden ser de 2 ó 3 horas por vía aérea o de 4 días por vía terrestre a cualquier punto de la zona euro-mediterránea.
Los sectores de producción representados con mayor fuerza en Maroc in Mode serán: Moda femenina, moda masculina, moda infantil, moda íntima y prendas de baño, denim/casual/sportswear, medias y prendas de punto. Se reunirá la oferta de 250 expositores.
Y se presentarán colecciones de invierno 2011-12 para servicio inmediato; colecciones actualizadas para verano de 2012; y colecciones principales para otoño-invierno de 2012-13. La más amplia cobertura de temporadas que se pueda encontrar en ninguna otra feria europea de este período. Las fechas serán del 16 al 18 de noviembre de 2011, de miércoles a viernes.
El lugar y las circunstancias. El doble evento está organizado por la asociación sectorial Amith, de la que se hablaba al comienzo de este artículo, con el apoyo de Maroc Export, la entidad marroquí para el fomento de las exportaciones.
En esta ocasión ha elegido un lugar excepcional: la doble feria Maroc in Mode & Maroc Sourcing se celebrará en el Centro de Convenciones del Hotel Palmeraie Golf Palace, dotado de los más modernos servicios para todo tipo de acontecimientos.
Está ubicado en un antiguo palacio árabe de las afueras de Marrakech, a 10 kilómetros del centro de la ciudad. Enfrente del hotel crece el famoso palmeral que le da nombre, con su jardín de jacarandá.
[Publicado en TEXTIL EXPRES Suplemento 197 — octubre 2011 ].
