Si la moda es siempre materia propicia para una fiesta, cuando se trata de moda infantil se presta a ello mucho más. Para los niños, la moda es siempre un juego. Y todo juego es algo divertido, festivo por naturaleza.
En este verano de 2012, además, presentando en un ambiente conmemorativo del pasado (por la efemérides que se celebraba) lo que se supone que serán las tendencias para dentro de un año, estábamos de algún modo construyendo adivinanzas sobre lo ya vivido, en un intento de sorprendernos a nosotros mismos.
¿Qué se puede llevar el año que viene, que no hayamos visto ya en tantos años anteriores? Y sin embargo siempre hay margen para la sorpresa. Bajo el lema «Happy Fimi, happy fashion», 135 stands de marcas individuales y un cierto número de espacios corporativos desplegaban las colecciones capaces de suscitar todas las fantasías… y de poner a trabajar los cuadernos de pedidos.
Y había que añadir la imaginación del mundo de Agatha Ruiz de la Prada (nueve licenciados multiplicando las ideas de la diseñadora en otros tantos ámbitos creativos) y la veintena de diseñadores independientes que aportaban su frescura imaginativa en el espacio See Me, y más aún en el proyecto nuditos.
See Me Walking fue, por otra parte, el escenario adecuado para que impartieran sus «masterclass» dos diseñadores invitados: Dolores Cortés disertando sobre las claves de su éxito, y el galardonado maestro Elio Berhanyer compartiendo con los jóvenes su larga historia de creador a la vez que presentaba la imagen de la próxima edición de Fimi (enero de 2013) que le ha sido encomendada.
En total, según el cómputo de la propia feria, 212 expositores directos o indirectos, con crecimiento de un 9%, presentando 270 marcas, participaban en esta convocatoria; procedentes (aparte de las españolas, obviamente) de Portugal, Alemania, Reino Unido, Holanda, Grecia y Estados Unidos.
Estaba también prevista una internacionalidad recíproca, pues la feria había invitado a diferentes misiones comerciales (unas trescientas personas) procedentes de Italia, Marruecos, Portugal, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Suiza y Emiratos Árabes Unidos, y esperaba además un flujo importante de compradores individuales de otros diversos países.
Los expositores eran conscientes del gran esfuerzo hecho en captar el mercado exterior, y lo agradecían, teniendo en cuenta que, en la actual situación económica del país, la exportación es un recurso fundamental.
Esta orientación preferente al mundo de más allá de las fronteras hizo que, en esta edición, además del protagonismo lógico del presidente Folqués y del director general Cubel, hubiera un tercer interlocutor relevante: el director de Internacionalización de la Generalidad Valenciana, Daniel Marco, impulsor necesario de este tipo de operaciones.
El ambiente del certamen, con un suelo de moqueta verde hierba, era muy agradable y alegre. El entorno general, también. Agatha Ruiz de la Prada había sido la responsable de la imagen de este año conmemorativo, con un resultado excelente.
Por otra parte, el recinto mismo (en la planta superior del pabellón 6, con una superficie de 5.500 m2) era novedoso para Fimi. Es un nivel que la Feria normalmente no utiliza, de modo que, por el momento, le quedará asignado a Fimi en permanencia. Eso permitirá no desmontar los stands de los expositores que vayan a repetir presencia en enero de 2013, con lo que se ahorrarán el coste de una nueva instalación.
Había sectores especiales, como La Ilusión Camina (exposición de calzado), el Jardín de las Telas en el que los estudiantes realizaban experiencias de moulage, y el Fórum de Tejidos. También un ensayo novedoso: los showrooms de los agentes comerciales.
Los desfiles mantuvieron su protagonismo en Fimi, con mayor diversificación. La Pasarela Fimi Fashion Show es siempre, en esta feria, un acontecimiento esencial. La actual edición contó con la participación de once firmas: Oh Soleil, Bambolina, Bóboli, Elisa Menuts, Lea Lelo, Lourdes, Larrana, Barcarola, Oca-Loca, Jo&Jo y Pan con Chocolate.
Sin embargo, el programa de esta ocasión fue mucho más rico. Por una parte hubo, bajo el apelativo de Día Mágico, los desfiles de atuendos para comunión y ceremonia en los que participaban las creaciones de casi una treintena de marcas. Por otro lado se presentaba la selección Gran Canaria Moda Cálida con las firmas Rosa La Cave, Elena Rubio y Delia Miranda. Y el desfile de moda baño, con la producción de 28 casas especializadas; nunca la moda balnearia infantil había tenido una representación tan amplia.
El informe final confirmó las impresiones: aumento de la proyección internacional. Días después de la clausura de la feria, la organización difundió el siguiente informe final:
«Una de las conclusiones más significativas de la última edición de Fimi ha sido el incremento del 6% en la cifra de compradores extranjeros. Éstos procedían tanto de mercados ya tradicionales en Fimi como es el caso de Emiratos Árabes, como de otros colectivos profesionales de países emergentes para la exportación de productos infantiles españoles, como son Australia, Sudáfrica, Argentina o Bolivia. Dos ejes: Latinoamérica y el Este de Europa, sobre los que Fimi ha hecho hincapié. Un total de 35 países.
Los expositores han valorado de manera muy favorable el gran esfuerzo llevado a cabo por parte del certamen de invitar y convocar a compradores extranjeros. “Se ha percibido un notable aumento de la internacionalidad en la feria”, en la cual había un ambiente propicio al negocio».
La nota no hace ninguna referencia a la audiencia total. Se ha querido remarcar únicamente la internacionalidad.
[Publicado en TEXTIL EXPRES Suplemento 202 — septiembre 2012 ].