A finales de septiembre, la Alfândega de Oporto fue el escenario de la edición número 40, o lo que es igual, el vigésimo cumpleaños, del salón textil Modtissimo, que lo celebró jubilosamente, con un éxito de concurrencia incrementado por la conjunción de calendario con la 28 Convención Mundial de la IAF en la misma ciudad.
Ahora, los días 27 y 28 de febrero de 2013, hubo otro Modtissimo, pero no fue el número 41 de los salones, sino la 1ª Porto Fashion Week, pues el certamen de tejidos tradicional se mudó en Semana de la Moda, con un abanico más amplio y menos técnico de productos, y con un componente de festival que implicaba más a la ciudad. Características estas que definirán también las próximas ediciones.
Los organizadores hicieron un balance tan rotundo como sencillo: «Porto encheu-se de moda». Aparte de otro tipo de público que se sumó a la fiesta, hubo 5.100 compradores (4.629 nacionales y 462 internacionales), rebasando las previsiones de los promotores.
— El salón, como núcleo. El salón textil no lo era todo esta vez, pero sí lo esencial, el pretexto para que lo demás se organizara. Hubo 66 expositores de tejidos y accesorios: 40 portugueses y 26 extranjeros (con predominio de italianos). Del total, 52 eran expositores directos y 14 representados por agentes. Había cinco firmas españolas: Padró y Casas, y Vidal Aymerich, con stand propio; y Diverchildren, Grupo Dimas, y Sidográs, representadas.
El Club de Confeccionistas contaba con 36 fabricantes de prendas para adultos, a los que había que añadir 21 de El Mundo de la Infancia. El universo de los diseñadores estaba representado por 10 participantes en el Fórum de los Nuevos Talentos. El total se complementaba con 30 stands de servicios. En conjunto, 163 expositores de las diversas especialidades.
Todo esto se perfeccionaba con el espacio Zone Lifestyle, exclusivamente dedicado a decoración y textiles de hogar, y el espacio del todo revolucionario organizado por el Citeve bajo el nombre iTechStyle, Foro de los Textiles Innovadores, dedicado a promover la creatividad en la cadena del textil-vestuario (desde la gestión hasta los productos y servicios) y a estimular el espíritu empresarial. Complementado con un programa de conferencias.
— Y alrededor, la ciudad. Para ampliar el radio y el espíritu del evento llamado Modtissimo, los organizadores se apropiaron del concepto anglosajón Fashion District, un espacio urbano que hoy todas las grandes urbes tienen identificado y que es a un mismo tiempo un polo de generación de negocios y de nuevas formas de expresión para el espíritu de la ciudad.
Aquí se promovieron por el momento conciertos y exposiciones, cócteles en las tiendas de moda del sector y workshops variados. La patronal textil promotora de Modtissimo, ATP, trabaja ya en la recogida de ideas para dar en la próxima convocatoria del salón, a comienzos del otoño, un abanico más amplio de propuestas lúdico-culturales.
A estos efectos, el entorno de la fiesta será básicamente la parte baja de la ciudad, «a Baixa», el «downtown» en un sentido muy literal, que es el área de la movida, de las tiendas de diseñador (doce de ellas se habían asociado a la promoción de este primer evento) y de los bares de copas. Y también, todo hay que decirlo, de venerables monumentos.
En esta primera edición de la nueva fórmula, la presencia de extranjeros fue superior a lo que se esperaba. Y llegaron con voluntad de hacer negocios. Algunos expositores elogiaron a los compradores franceses, españoles y alemanes; otros, a los ingleses y nórdicos. En gran parte, eso depende de las especialidades que cada cual trabaja.
El estado de ánimo final era de satisfacción.
[Publicado en TEXTIL EXPRES Suplemento 206 — abril 2013 ].