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Las marcas y el «retail» buscan proveedores no solo próximos sino fiables y de calidad.

Las cosas pintaban bien para un salón, Modtissimo, que cumplía su 60ª edición este pasado mes de septiembre, convocado en Oporto para dos días, el martes 6 y el miércoles 7, llamados a ser unas jornadas de trabajo intenso en el recinto ferial de Exponor.

Superado el momento de seguir dándonos abrazos, porque eso del reencuentro físico del que todos decíamos que había «hambre» ya no es válido para este salón (su reencuentro presencial ya había tenido lugar en la edición precedente), la dinámica de las cosas vuelve a tener que ver con el interés de los compradores, el estado de la coyuntura, y el atractivo de la oferta, mayoritariamente portuguesa pero también internacional. Tanto el despliegue de calidad y creatividad de los tejedores y confeccionistas portugueses, como la continuada actuación de promoción exterior que desarrolla la industria del país con ayuda de las instituciones y las asociaciones sectoriales, siguen movilizando a los compradores que visitan este evento.

Tomaron parte 240 expositores (también contabilizados como 267 en otros listados, en función de las marcas presentadas) sobre una superficie de 9.500 m2, «en una muestra de la evidente fortaleza y resiliencia del sector», según dijo el director de Modtissimo, Manuel Serrão. Presentaban 350 colecciones de tejidos e indumentaria. A destacar el regreso de los compradores japoneses y americanos en general, así como la de los visitantes neerlandeses.

Estos acudieron en el contexto de la figura de «País Invitado» que por segunda vez concedía Modtissimo, con la etiqueta «Guest Country NL Netherlands). Los Países Bajos siempre exhibieron una relación privilegiada con Portugal, como país proveedor de manufactura para sus marcas de vestir. Y ahora, dentro de la tendencia a reenfocar la cadena de suministro y buscar proveedores de cercanía, el sector neerlandés de la moda ha acentuado el interés por alianzas con la industria portuguesa.

Importante en este momento es no solo garantizar un abastecimiento regular, eficaz, flexible, rápido y en plazos, sino que el producto responda a unos niveles de calidad y de sostenibilidad que no todas las plataformas industriales proporcionan. El lema de la 60ª edición de Modtissimo era «El futuro de la moda y de los textiles es circular». Y esa circularidad es lo que las marcas líderes en Europa quieren garantizar mediante proveedores de confianza. Esto es igualmente válido para el comercio de moda multimarca, que busca fiabilidad en su abanico de «partners» confeccionistas.

La visita a Modtissimo se prolongó con una gira adicional de empresarios de Países Bajos por fábricas textiles del Norte de Portugal, fruto de una colaboración entre la Asociación Empresarial de Portugal, AEP, y de la Agencia Empresarial de Países Bajos, RVO.

Aunque de menor entidad, es una noticia curiosa y destacable que España «envió» a un grupo de visitantes que casi constituían «misión oficial» de una comunidad autónoma. Nos referimos a la visita al salón por parte de siete empresas asturianas de moda, organizada por la Sociedad de Promoción Exterior Principado de Asturias, S.A. (Asturex). Tres de ellas trabajan moda mujer en general (Coco, Nereide Asturias, Ultrammar), y el resto se dedican a moda para ceremonia (Chus Rodríguez de moda infantil, De Boda con María para trajes de novia, y Nuria Ordiales para convidados) y complementos (Yes50, de bolsos, aunque también abrigos de piel).

En cuanto a la oferta presente, era destacable, como novedad, la presencia de The Woolmark Company, que escogió Modtissimo para presentar su última edición de la guía de tejidos e hilados de lana merino, The Wool Lab. De nuevo, su motivo para exponer en Oporto es el que ya apuntábamos: The Woolmark Company también está percibiendo la tendencia de las marcas europeas a regresar a fabricaciones próximas a su mercado; así que no basta con promover la lana entre tejedores y confeccionistas asiáticos (hasta hace poco, «las fábricas del mundo»), sino que es preciso reactivar la promoción en la industria de los países que, si en el pasado ya abastecieron la demanda de ropa en los grandes mercados, ahora vuelven a recobrar atractivo para las marcas. De este modo, la agencia australiana de fomento de la lana quiere actualizar su conocimiento del textil portugués y también refrescar la imagen de la lana en la cadena de suministro con origen en Portugal.

¿Y qué tal discurrió la feria? Las noticias durante las dos jornadas, basadas en la experiencia de los participantes, ya apuntaban a un buen número de entradas y una actividad considerable. Pocas horas antes de cerrar el evento, se estimaba una cifra de 4.000 visitantes, de ellos un diez por ciento extranjeros.

© TEXTIL EXPRES


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