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ARTÍCULO PRIME
TEXTIL EXPRES - REVISTA 254

¿Alguien puede creer que los relevos en Inditex hayan sido fruto de la improvisación? Sin embargo...

Relevo en Inditex (2): Rumores de discrepancias y precipitación no ayudan. (Actualizado).

 

Como decimos en otro artículo, la entrevista con Marta Ortega en TWSJ en septiembre no fue casual. La entrada de Óscar García Maceiras como secretario del Consejo, en marzo, tampoco. En Inditex casi todo se planifica con tiempo, y se prevén los plazos de rodaje.

Sin embargo, las informaciones emanadas de Galicia apuntan a alguna precipitación en los anuncios del 30 de noviembre. Quizá no estaba previsto efectuarlo entonces ni de manera abrupta. Parece que la filtración del «próximo cese» (ahora ya consumado) de Carlos Crespo como consejero delegado forzó una reunión urgente al máximo nivel el lunes 29 de noviembre por la tarde. Se terminaron de atar los cabos, y se prepararon las notas para comunicar a los medios y a la CNMV los planes de relevo de varios directivos.

En la reunión participaron, dentro de un grupo reducido, personas como Amancio Ortega, Pablo Isla, José Arnau (vicepresidente y hombre fuerte del grupo, mano derecha de Ortega y de la familia, que a un observador perspicaz le recuerda el papel que tuvo Florencio Lasaga en El Corte Inglés), el director de Finanzas del grupo, el responsable de Servicios Generales, y el director financiero y de operaciones de la cadena Zara, además de un matrimonio: Marta Ortega, futura presidenta, y su marido Carlos Torretta, quien actualmente trabaja en el Departamento de Comunicación de e-commerce de Zara. Se ha sugerido que Marta Ortega aceleró su regreso a Galicia tras una jornada hípica en Madrid. Sin embargo, también tenía programado visitar esa noche en el puerto de Coruña la exposición de la obra de Peter Lindbergh, fallecido en 2019, quien, además de ser un famoso fotógrafo de modas, fue el retratista de la boda de Marta Ortega y Carlos Torretta en 2018.

En cualquier caso, en esa reunión se decidió acelerar las cosas. Se ha dicho también que Carlos Crespo solicitó permanecer en el grupo, una vez cesado como consejero delegado. Sea cierto o no que lo solicitó, continúa en el mismo en calidad de director general de Operaciones, Transformación Sostenible y Digital. Se ha afirmado también que mantenerlo en ese cargo le ha ahorrado a Inditex despedirlo con una indemnización que podría haber ascendido a 3 millones de euros, según publicó «El Economista».

Se ha rumoreado estos días que hacía meses que se habían hecho visibles las diferencias entre la familia Ortega-Pérez y Carlos Crespo en cuanto a la conducción del grupo. Crespo procedía del mundo de la auditoría (Arthur Andersen, hoy convertida en Deloitte), y entró en Inditex para administración financiera y control de existencias, ocupándose más tarde de auditoría interna; en todo caso, es seguro que era un hombre de confianza de Pablo Isla. Estos días se ha escrito que el cese de Crespo llevó aparejado la dimisión de Isla. Y también lo contrario: que el relevo en la Presidencia dejaba a Crespo sin apoyo para continuar al máximo nivel ejecutivo. Asimismo se ha dicho que Pablo Isla, durante la etapa final de discrepancias entre propietarios y gestión, intentó colocar a otra persona como consejero delegado, que también era de su confianza, procedente «del entorno de Telefónica». No lo habría logrado. Y se ha escrito que el nombramiento de otra persona habría provocado la decisión de Isla de adelantar su salida del grupo (pero no de precipitar el anuncio, cosa que se hizo, como decimos, ante la filtración de rumores). Óscar García Maceiras era la persona preferida por la familia Ortega. En algunos círculos se ha dicho incluso que era concretamente el favorito de la próxima presidenta, Marta Ortega. Pero todo esto son comentarios de personas que quizá imaginen más que lo que saben.

Ahora bien, la existencia de los rumores tampoco ayuda a transmitir una imagen neta, a efectos de confianza bursátil, sobre las causas y el modo en que se realiza la transición generacional en Inditex.

No viene mal, de todos modos, recordar algo: el antecesor de Pablo Isla en Inditex fue José María Castellano. Alcanzó el grado de vicepresidente y consejero delegado. Trabajó en el grupo de 1984 a 2005, algo más de veinte años. Y su salida fue también un poco traumática, con una pérdida de confianza recíproca a raíz de un fallido acercamiento empresarial a Unión Fenosa.

Pero si Inditex pasó de una mediana empresa textil a un gigante mundial de la distribución de moda con José María Castellano, su expansión y modernización bajo Pablo Isla fue todavía mayor. No hay razones para descartar que el tándem Marta Ortega-Óscar García no vaya a funcionar, como mínimo, igual de bien.

© TEXTIL EXPRES


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