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La llamada «Ciudad Real Madrid» es uno de los principales centros de entrenamiento deportivo del mundo, con once campos de fútbol y 1,2 millones de m2 de instalaciones. Mantener un césped en condiciones perfectas no es tarea fácil.

Para que todos los equipos, utilizando cualquiera de esos campos, y sin importar el comportamiento del clima ni la intensidad de uso, puedan disfrutar de un césped de características óptimas, no hay más remedio que buscar soluciones técnicas. Ya en 2005, cuando se construía dicho centro, se contactó con Desso Sports Systems, filial del fabricante holandés de alfombras y moquetas Desso, que suministra estos productos para edificios públicos, oficinas, colegios, hospitales y líneas aéreas. Dicha filial se ocupa de un producto muy particular: césped artificial. Y ahora mismo está modernizando los campos del centro de entrenamiento del Real Madrid.

Se ha escogido una solución combinada de campos con césped natural, campos híbridos y campos 100% artificiales, en el conjunto de los once terrenos de juego. Los de césped artificial pueden utilizarse de forma intensiva, preservando la calidad de los de hierba natural, que sufren menos.

La compañía holandesa es un ejemplo de derivación desde el sector textil clásico al de aplicaciones técnicas, con esta división especializada en campos de deportes innovadores para la práctica del fútbol, el rugby y el hockey, así como el tenis. A lo largo de su historia ha instalado más de 50 millones de m2 de césped en clubs deportivos profesionales y de aficionados, y su césped «GrassMaster» híbrido se encuentra en unos 450 estadios y centros de entrenamiento, entre los que destaca del de Wembley.


[Publicado en TEXTIL EXPRES Suplemento 199 — febrero 2012 ].


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