Como ya comentábamos en el número anterior, la desaparición del salón The Brandery en enero último dejaba a Barcelona fuera de los calendarios feriales, en cuanto al vestir. Pero la actualidad de la moda no se reduce a salones; su abanico de eventos es muy variado. Como lo demuestra París, mundialmente famosa por sus desfiles décadas antes de que existieran ferias de la especialidad, que fueron un invento de posguerra.
Aunque con historia intermitente, la capital catalana tiene práctica en ambos géneros de acontecimientos. Y últimamente está demostrando una buena capacidad organizadora con su 080 Barcelona Fashion, sea en invierno o en verano, como acaba de demostrar del 8 al 12 de julio de 2013, en la que era ya su edición duodécima. Incluso dándose maña para administrar sus finanzas, ya que, siendo una actividad soportada por la Generalidad, se apaña para operar con presupuestos adelantados, lo que le evita estar pendiente de la aprobación de las cuentas públicas. La dotación de las suyas para los dos semestres de este año ya había sido publicada en el BO de la Generalidad, con el adecuado aumento, el año anterior.
La ejecución de los programas 080 Barcelona Fashion está adjudicada al Consorcio de Comercio, Artesanía y Moda de Cataluña (CCAM), entidad adscrita a la Generalidad, en el marco de la Consejería de Empresa y Empleo. El gerente del CCAM, es Miquel Rodríguez Urraca, que está realizando un trabajo de alta calidad profesional.
Este Consorcio es un órgano integrado por la Administración de la Generalidad de Cataluña y por el Consejo General de Cámaras Oficiales de Comercio, Industria y Navegación de Cataluña, especializado en gestionar políticas de promoción de las tres áreas de actividad que figuran en su nombre. Es lógico, pues, que sus responsables sean ante todo buenos gestores, y sólo secundariamente funcionarios o políticos. El éxito de su tarea dependerá de la medida en que logren equilibrar en lo posible esas funciones y priorizar la gestión.
Siguiendo el precedente establecido en enero, la manifestación se desarrolló en el edificio denominado DHUB, Disseny Hub (Centro de Diseño) Barcelona, que posiblemente se afiance como sede permanente en el futuro, y que forma parte de la remodelada Plaza de las Glorias Catalanas (en la intersección de tres vías básicas del urbanismo de la ciudad: la Avenida Diagonal, la Gran Vía de las Cortes Catalanas y la Avenida Meridiana).
El lema de la edición era «Marca troba talent», marca encuentra talento, que permitía un desarrollo de sugerentes pareados: diseñador busca industria, creativo encuentra inspiración, editor busca contenidos, «frontrow» encuentra «backstage»…
— Los contenidos esenciales. A lo largo de cinco días tuvieron lugar 32 desfiles de diseñadores y marcas. Esta dualidad de contenidos es esencial para comprender el actual espíritu de la manifestación. Por una parte hay los valores emergentes; fueron los que justificaron el nacimiento del 080, pero ahora hay que ver en qué y con quién se gasta el dinero, y cuáles son los que emergen realmente y los que flotan a la deriva por tiempo indeterminado. Aquí los organizadores ya han saneado mucho.
Luego hay el soporte a las marcas comerciales que ya tienen un mercado y que pueden sacar de cualquier ayuda un partido real. El estímulo es doble en los casos en que ya se da una colaboración fáctica entre marcas comerciales y diseñadores. Se puede citar, con matizaciones de personalidad diversas a TCN, Yerse, Guillermina Baeza, Josep Abril, Miriam Ponsa, Bóboli, Cóndor, Torras, Naulover, Punto Blanco, Escorpión…, integrantes de la Asociación ACTM. Y luego están los desfiles de prestigio de marcas consagradas como Mango (que presentó sus nuevas líneas Kids y Sport/Intimates), Desigual (con su colección «For everybody» y la top brasileña Adriana Lima) y Custo Barcelona (presentando un anticipo parcial de la moda que llevará a la Semana neoyorquina), en cuyo caso son ellas las que aportan un plus de imagen a la manifestación.
El programa de 080 Barcelona Fashion cobijó actos como el «Texmeeting by Texfor» (debate sobre la aportación de los textiles de cabecera a la creatividad de la cadena textil/moda), o la presentación de cifras del comercio textil español; también prohijó la masterclass de Manuel Outumuro, la exposición antológica de la confección en serie desde su surgimiento en los años 60 (aunque instalada en un recinto ajeno al escenario del 080), la final del concurso de nuevos talentos de Elite Model Management, la entrega de los premios de Modafad, y otros diversos acontecimientos.
La manifestación contó con cerca de 30.000 asistentes, entre periodistas y otros informadores, compradores y agentes de centrales de distribución, profesionales del sector textil y público en general.
Fue muy importante la presencia de los medios de comunicación. Un total de 535 profesionales fueron acreditados por 235 medios de ámbito catalán o estatal, y otros 80 periodistas internacionales representaban a 69 medios de países extranjeros.
— Y la cita para enero: con un salón específicamente ferial. En la conferencia de prensa que había tenido lugar con anterioridad a la apertura de la duodécima edición del 080 Barcelona, el gerente de la entidad organizadora, Miquel Rodríguez, se había referido al desarrollo seguido hasta ahora por el proyecto, cubriendo las vertientes de la Creación, la Producción, la Formación y la Internacionalización.
Textil Exprés se interesó por la vertiente de la Comercialización, que no aparecía mencionada en ese catálogo de atenciones, y el gerente de 080 Barcelona anunció entonces una nueva acción en marcha que hasta aquel momento no había sido citada: la creación de un salón ferial propiamente dicho, adicional a la pasarela, pequeño en principio, con expositores muy seleccionados, que se convocará en enero de 2014 por primera vez… y que corregirá el vacío dejado por The Brandery.
[Publicado en TEXTIL EXPRES Suplemento 208 — septiembre 2013 ].